La protección no es un juego y es mejor optar por un servicio establecido y certificado.
Los factores de riesgo, como la actual pandemia, generan un ambiente en el cual prolifera la inseguridad. No es una mala idea invertir para estar protegidos, sobre todo cuando hablamos de blindaje automotriz, pero buscar el cuidado propio nos puede llevar a caer en errores solo por ahorrar un poco.
Daniel Portugal, Tesorero y Asesor del Consejo Nacional de la Industria del Blindaje (CNIB), nos hace una serie de recomendaciones para no caer en estafas del llamado blindaje basura, que en lugar de ayudar, puede ser perjudicial a grandes escalas.
Primero que nada, debemos entender el término “blindaje basura” y así lo explica el asesor del CNIB. “Debemos entender como ‘blindaje basura’ a toda la práctica no certificada del servicio. Hay quienes te ofrecen blindar tu vehículo, pero no tienen ninguna especie de certificación o capacitación adecuada para la manipulación tanto de vehículos, como de materiales, que al final resultan ser materias primas no especializadas que no garantizan la salud de quienes buscan blindar su vehículo”.
Y es que blindar un automóvil no es tarea sencilla y se requiere de conocimientos en diversos aspectos para hacerlo de manera adecuada. “No solo las marcas de automóviles le ofrecen capacitación a quienes blindan coches, también lo hacen los proveedores, quienes te explican cómo manipular de manera correcta y precisa los materiales adecuados. No se trata de cualquier cosa, hay saber datos técnicos como cómo cortar y cuánto calentar un material para su aplicación, sin mencionar el armado y desarmado de coches como los alemanes, que tienen cámaras, sensores y otros elementos que hacen que se adquiera cierto nivel de conocimiento”.
Las consecuencias de adquirir blindaje basura son claras y muy concisas y se relacionan con la salud de quienes solicitan el servicio y así lo expone Daniel Portugal. “La diferencia entre un servicio certificado y uno que no lo es va más allá del precio. Hemos notado una brecha de hasta 40 por ciento menos de lo que ofrece un servicio de blindaje certificado, pero no solo es eso, ha habido casos en los que utilizan acero inoxidable en lugar de un metal especializado y eso evidentemente puede afectar la integridad y la salud de los ocupantes de un vehículo”.
Daniel invita a los interesados en adquirir un servicio de blindaje a acercarse al Consejo Nacional de la Industria del Blindaje, donde pueden obtener mayor información. “No es tan difícil identificar a un instalador de blindaje certificado y precisamente debemos preguntar por las certificaciones que ofrecen, además, cuando blindas un vehículo es necesario que te den un holograma que haga constar que se realizó este servicio, si no lo hacen, seguramente se trata de un servicio “pirata”. La información sobre quienes ofrecen servicio están registrados a nivel federal, pero si no pueden acceder a los datos, los invitamos a entrar a www.CNIB.com.mx, donde les podemos asesorar y dar toda la información que requieran al respecto”.
La integridad, la salud y la vida son cosas intangibles y comprometerlas solo por ahorrar unos pesos no vale la pena, por lo que te recomendamos acudir a un servicio de blindaje certificado para garantizar la seguridad de quienes realmente importan.
Fuente de información: https://www.informador.mx/economia/Blindaje-basura-vale-la-pena-el-riesgo-20200602-0116.html