Que incluso marcas con la elegancia y el lujo de Rolls-Royce se decidieran a lanzar su propio SUV dice mucho del impacto que este tipo de coche ha tenido en la industria del automóvil y el público. Con el Rolls-Royce Cullinan la firma británica demostró hasta qué punto se puede llevar el lujo en este tipo de modelos, y si por algún casual los VIPs que lleva en su interior no solo necesitan lujos, sino también protección, compañías especializadas en coches blindados como la alemana Klassen han respondido a la demanda.
Conocimos a esta compañía de hecho con una apuesta aún más ambiciosa que incluía convertir al Cullinan en una blindada limusina SUV, pero ahora nos encontramos con otro ejemplar creado por la compañía que se conforma con la longitud estándar y que de hecho está buscando dueño.
Que incluso marcas con la elegancia y el lujo de Rolls-Royce se decidieran a lanzar su propio SUV dice mucho del impacto que este tipo de coche ha tenido en la industria del automóvil y el público. Con el Rolls-Royce Cullinan la firma británica demostró hasta qué punto se puede llevar el lujo en este tipo de modelos, y si por algún casual los VIPs que lleva en su interior no solo necesitan lujos, sino también protección, compañías especializadas en coches blindados como la alemana Klassen han respondido a la demanda.
Conocimos a esta compañía de hecho con una apuesta aún más ambiciosa que incluía convertir al Cullinan en una blindada limusina SUV, pero ahora nos encontramos con otro ejemplar creado por la compañía que se conforma con la longitud estándar y que de hecho está buscando dueño.
Reforzado pero igualmente lujoso
Hablamos de un Cullinan capaz de ofrecer una protección balística de 360 grados que incluye ventanas antibalas de varias capas, bisagras de las puertas reforzadas, ruedas run flat o frenos más robustos y suspensión modificada para lidiar con el peso extra de esta versión. Incluso la electrónica y batería de vehículo está protegida frente a posibles daños. Para señalar la condición especial y protectora del modelo a este Cullinan tampoco le faltan unas luces de emergencia y sirena, un sistema de extinción de incendios o un intercomunicador entre otros añadidos.
Pese a esta gran apuesta por la seguridad el Cullinan de Klassen no ha perdido ni un ápice del lujo que caracteriza a los modelos de Rolls-Royce. Así podemos encontrarnos con una tapicería de la más alta calidad en cuatro asientos, los traseros con todas las comodidades imaginables y ajustes electrónicos, incluyendo dos pantallas para gestionar el sistema de infoentretenimiento, mesas abatibles, conectividad móvil de última generación, navegación, Televisión, función de wifi hotspot, entradas de USB y por supuesto un techo con iluminación estrellada como buen Rolls.
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